cambiando café por té.
tazas floreadas por lacónicos mates de fierro.
mi insoportabilidad por mi ermitañismo.
los trabajos por vocaciones.
lo posible por lo soñado.
el conformismo por el anhelo.
y los pablos, por cualquier otro hombre.
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2 comentarios:
¿Cómo los Pablos? Pobre yo... =(
Esta muy bien, el té es lo mas, siempre le da glamour a todo.
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